TCA y Psiconutrición
Tratamiento de los problemas de alimentación.
Si tu día a día es pensar en comida y vigilar tu cuerpo
Primera reunión GRATUITA.
Servicio ONLINE, no presencial.
Para que la alimentación NO sea más el centro de tu vida
Desde la psicología de la alimentación trabajamos para abordar las dificultades entorno al cuerpo y la comida.
Te propongo que te tomes unos minutos para responder estas preguntas:
¿Alguna vez has seguido una dieta?¿Qué te llevó a empezarla? ¿Y a dejarla?
¿Conseguiste el objetivo? ¿Lo pudiste mantener? ¿Por cuánto tiempo? ¿Qué suponía mantenerlo?
¿Cómo es la relación con tu cuerpo? ¿Lo miras desde la aceptación o desde el rechazo?
Normalizar una mala relación con la comida NO es normal
Pero, por desgracia, es algo más habitual de lo que creemos.
Antes te proponía unas preguntas y era con un objetivo claro, preguntarte el para qué de todo ello.
¿Para qué te pusiste a dieta? ¿Para qué necesitabas cumplir ese objetivo?
Te diré algo; nos solemos relacionar con la comida y el cuerpo desde el lado equivocado.
Alimentarnos y nutrirnos NO es una opción, es NECESARIO.
Es vital, es algo sin lo cual no podemos sobrevivir. Y necesitamos comer SUFICIENTE.
Y ese «suficiente» para cada persona es diferente, e invalida el uso de dietas cuyo objetivo es comer menos de lo que necesitas para….(incluye el objetivo que prefieras).
No, no es normal que nos relacionemos con los alimentos desde el «debería/no debería»; «puedo/no puedo»; «esto es bueno/esto no».
Necesitamos comer de todo, variado; y en función de nuestras necesidades (las necesidades del cuerpo, no las exigencias de la mente).
Con el cuerpo nos han vendido que todos tenemos, y podemos, ser un tipo de cuerpo; y si no eres ese cuerpo estás mal. Pues tampoco es así. Tu cuerpo ya es uno, el tuyo. Y es el que es determinado e influido por muchos factores. Entre esos factores la alimentación es uno de ellos. UNO, no el único.
El control extremo con el objetivo de llegar a ESE cuerpo deseado tiene riesgos, muchos riesgos.
Estamos hablando de problemas REALES.
Un TCA es mucho más que un problema con la comida.
- No, la comida NO es el problema (aunque lo parece).
- No, el cuerpo NO es el problema.
- No, la solución NO está en la dieta o la talla.
La comida es solo la punta del iceberg, es lo visible, lo que más fácil se detecta por la persona y su entorno. Sin embargo, solo trabajando lo que hay bajo la superficie podremos soltar el síntoma alimentario.
Te dejo la metáfora del iceberg para que veas qué más factores influyen. Por supuesto, cada persona es diferente; puede que reconozcas varios de esos factores o todos. Por ello cada proceso es personal y necesita un tiempo y ritmo diferentes.
Lo que esconden los TCA
Te dejo algunos datos
¿Sabías que en los últimos 20 años los casos de Trastornos Alimentarios se han duplicado? A nivel mundial, hemos pasado de tener un 3.4% a un casi 8% de la población pasando por un TCA diagnosticado.
La edad de comienzo de los TCA cada vez es más baja; y ya se sitúa en los 9 años.
El 70% de los adolescentes no se sienten bien con su cuerpo. Y un 11% está realizando conductas de riesgo que pueden terminar en un TCA. Conductas de riesgo podrían ser empezar una dieta; empezar a contar calorías; saltarse comidas; pesarse o medirse el cuerpo continuamente, etc.
El 21% de las mujeres y el 15% de los hombres universitarios, están en riesgo de sufrir un TCA.
Pero, y aquellas personas que no reciben un diagnóstico, ¿cuántas son? No tengo un dato exacto que ofrecerte, pero te invito a pensar en cuántas personas de tu entorno conoces «enganchadas» a dietas o preocupadas de manera constante por su cuerpo.
(Fuente: asociación TCA Aragón)
Y yo, ¿cómo sé si tengo una relación conflictiva con la comida?
Tal vez te sientas reflejada en alguna de estos puntos:
- Llevas tiempo a dieta, o pasando de dieta en dieta.
- Si te saltas la dieta sientes culpa y necesidad de compensar «el error».
- Pesar alimentos, contar macros, contar calorías, o alguna variante, es algo imprescindible para ti.
- Gran parte de tu día está ocupado con pensamientos en torno a la comida o el cuerpo.
- Sientes que si no controlas lo que comes todo se descontrolará.
- Tienes miedo a que tu cuerpo cambie si te saltas tu dieta.
- Te pesas, miras en el espejo o mides el cuerpo continuamente para ver si ha cambiado.
- A veces, o a menudo, rechazas planes si suponen exponer tu cuerpo o comida.
- Tus emociones, y tu día, va en función de lo que marca la báscula; si has cumplido la dieta; o cómo está tu cuerpo.
Si te ves reflejada en alguna de estas afirmaciones es que tu relación con la comida no marcha bien.
¿Puedes imaginar tu vida sin esto?
Ahora te pregunto, ¿Cómo sería tu vida si la comida y el cuerpo no lo ocuparan todo?
Imagina que la comida solo tuviera la función de alimentarte; que pudieras comer sin culpa; que tuvieras espacio en tu mente para pensar en otra cosa. Piensa cómo sería poder comer en función de tus apetencias y necesidades; escuchando tu hambre y honrando tu saciedad.
Imagina cómo sería sentirte bien en tu cuerpo, cómo sería no esquivar los espejos o pasar el día frente a ellos buscando cambios y zonas a rechazar/mejorar. Piensa en todos los planes que podrías hacer si tu autoestima y tu valía no dependieran de tu cuerpo.
Desde el espacio de terapia podemos trabajar juntas para mejorar todo ello.
¿Cómo?
- Revisamos tu relación actual con la comida y buscamos la función que está cumpliendo.
- Vemos cómo te relacionas con tu cuerpo y cómo te afecta esto.
- Desmontamos esas creencias y pensamientos intrusivos que te tienen enganchada; todos esos «debería», «y si…».
- Acorralamos los miedos que puedas tener, como el miedo a engordar o el miedo a perder el control.
- Ponemos mucha atención durante todo el proceso a las emociones; nuestra relación con la comida está muy ligada a ellas.
- Progresivamente, vamos flexibilizando la alimentación. Lo hacemos desde la escucha y prestando mucha atención a cómo te hace sentir.
- Trabajamos la relación con tu cuerpo enfocándola hacia la aceptación y el trato compasivo.
- Si lo deseas, buscamos cómo incluir el movimiento desde el placer. Revisamos qué te gusta y cómo, o cuándo, incluirlo.
- Fortaleceremos diferentes áreas que puedas considerar necesarias para tu día a día. Podemos trabajar habilidades sociales para relacionarte con otras personas; habilidades de comunicación para poder expresar tus necesidades desde la asertividad pero respetando tus límites.
- Abordamos y revisamos tu entorno. La función no es cambiar a tu familia, por ejemplo, sino que puedas ver cómo te afecta y qué puedes hacer tú.
¿EN QUÉ CONSISTE EL PROCESO DE TERAPIA?
Los pasos....
Exploramos el mapa
Lo primero que necesito es conocerte. Piensa que yo estoy a oscuras en un territorio que desconozco. Te necesito para saber por dónde voy.
Hoja de ruta
Una vez que conozco el mapa puedo crear un camino. Esto no lo hago sola; es decir, los objetivos los pactamos entre las dos.
Caminamos juntas
Aquí empieza el trabajo. Revisaremos patrones, trabajaremos pensamientos, emociones y comportamientos. ¿Para qué? Para poder ir creando nuevas herramientas.
Continúas tu camino
Todo ello tiene un fin muy claro. Buscamos que, poco a poco, puedas seguir tu camino sin que la comida sea más el centro de tu vida.
TARIFAS
Reunión informativa
- Gratuita
- Duración aproximada de 15 minutos
- Hablamos del motivo de consulta
- Resolvemos dudas
- Decidimos quién será tu psicóloga
Sesiones
- Duración de 50-60 minutos
- Material para trabajar durante las sesiones
- Soporte vía email y/o whatsapp
- En la comodidad de tu casa
- Desde Google meet
TESTIMONIOS DE PACIENTES
Preguntas frecuentes
Para diagnosticar un TCA, este tiene que cumplir una serie de criterios. Sin embargo, el hecho de no cumplir esos criterios no indican que no haya sufrimiento por parte de la persona.
Si tienes una mala relación con la comida, te cuesta comer, hay sobreingestas, pasas el día pensando en qué comer o no comer, sientes que estás muy preocupada por tu cuerpo; puedes estar necesitando revisar todo ello y comenzar un proceso.
Depende.
Necesitamos hablar de comida, sí. ¿Hablamos solo de comida? Ni mucho menos!
Como decía, cuando hay una dificultad con la comida, esta es solo la parte visible del problema.
La persona está utilizando la comida como forma de gestionar y sostener otras situaciones difíciles. El trabajo importante estará ahí.
Dependerá de cada caso en particular.
Revisaremos si hace falta incluir la figura de una nutricionista especializada en TCA y hablaremos sobre ello.
No.
La nutricionista te ayudará a reestablecer tu señal de hambre y saciedad; estará contigo para explorar e ir acercándote a los alimentos; intentará flexibilizar tu alimentación escuchando tus necesidades.
Y lo más importante, te acompañará para que lo hagas desde la escucha y la autocompasión.
Sin más maltrato hacia ti y tu cuerpo.
Muy buena pregunta!
Lo abordaremos siempre desde el respeto y la autocompasión.
Nuestro trabajo irá enfocado a la aceptación corporal (dejar de luchar contra él) y, después, intentaremos desarrollar esa mirada amable hacia él.
Los datos de carácter personal que consten en la consulta serán tratados por SORAYA
HERNANDEZ GARCIA e incorporados a la actividad de tratamiento CONTACTOS, cuya finalidad es atender tus solicitudes, peticiones o consultas recibidas desde la web, mediante correo electrónico o telefónico. Dar respuesta a tu solicitud y hacer un seguimiento posterior. La
legitimación del tratamiento es tu consentimiento. Tus datos no serán cedidos a terceros. Tienes
derecho a acceder, rectificar y suprimir tus datos, así como otros derechos como se explica en
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